Las típicas frases que se oyen y se dice en conversaciones entre amigos, con la familia o en reuniones sociales son:

"La cosa está muy mal"
"El que tiene trabajo hoy no puede quejarse"
"Hay que aguantar porque la situación no está como para escoger"

Pues bien, mi fin de semana comenzó el viernes por la tarde cuando me subí al coche camino de Galicia. A medio camino me llamó una buena amiga, con la que hacía varios días que no hablaba y le pregunté lo típico en estos casos:

-"Hola, ¿Cómo va, por dónde andas? Cuánto tiempo! Tenemos que quedar a tomar algo, bla bla bla... Qué tal todo?
Qué tal por el curro?"

"Que tal el curro?", esta fue la pregunta que marcó un punto de infexión en la conversación ya que, para mi sorpresa, la respuesta fue bastante negativa. Me explicó los problemas que tenía, las quejas y la verdad es que tenía toda la razón para estar crispada. Hablamos un poco más y nos despedimos...

El sábado, saliendo por ahí de copas, me encontré con otro caso igual. Otra amiga, la cual había empezado a trabajar recientemente en una empresa, y a la que hacía un par de semanas que no veía, se quejaba de algo muy similar:
Con un contrato de becaria pretendían ponerla en un puesto de mayor categoría que quedaba vacante (no recuerdo si por baja, maternidad o algo similar). El puesto suponía más horas, más responsabilidad, cargar con un teléfono de 'guardia', trabajo sucio (cosas poco éticas, según me explicaba), etc. Y el colmo era que seguiría con el contrato de becaria y cobrando lo mismo. Lamentable...

Creo que, por desgracia, casi todos conocemos a alguien que está en una situación de este estilo. A mi la verdad me da que pensar...

La situación laboral está mal y el trabajo escasea, pero no se hasta que punto se deben tolerar ciertas cosas en los puestos de trabajo. Muchos empresarios o jefes se aprovechan de la situación económica y de la necesidad de algunos empleados que no se pueden permitir el lujo de dejar su trabajo para intentar evolucionar y conseguir unas mejores condiciones laborales.
En una gran mayoría de los casos, estos empresarios, también créen que te están haciendo un favor dándote trabajo y olvidan que tú les estás haciendo a ellos un "favor" de la misma envergadura, produciendo y generandoles beneficios.

Ya se que no estoy diciendo nada que no sepamos todos, ni nada nuevo, simplemente me apetecía comentar estos dos casos y hacer la reflexión.

Con todo esto se me vino a la cabeza una canción (concretamente una estrofa) de un tema de "Violadores del Verso". La estrofa es de Kase-O. Tengo que confesar que soy "fan" de las letras de J. Ibarra, y creo que esta es bastante apropiada para este post :P

La estrofa es la siguiente, no tiene desperdicio: