La Fuga, un grupo del que no me considero un fan pero que nunca me disgustó escucharlo. Depende del momento, del bar, del lugar y de la canción puede ser agradable su música.

El caso es que a finales del 2009, el vocalista (conocido como Rulo) dejó el grupo. Además de por la música y las letras, un grupo se identifica mucho con la voz del cantante. Aunque una banda, después de incorporar a un nuevo vocalista, sean fieles a su estilo ... ya no es lo mismo, ¿no os parece?

Siguiendo la tradición instaurada por mi querida amiga Alegría, dejo una canción del grupo:



"De tanto besarte a ciegas me he quedado ciego.
De poco ha valido la pena jugar a este juego.

De tanto escuchar mentiras me he quedado sordo
Y de mi boca solo salen puñados de silencio.

Y he vuelto a abrazarme a las noches.
Mis labios, borrachos de sed,
Ya no quieren beber
Veneno ..."



Hace un par de semanas, La Fuga, dio un concierto en Bilbao y la gente salía un poco "descolocada" ya que no sabían que el grupo tenía una nueva voz.

Son muchos los grupos que se ven obligados a cambiar de vocalista, y parece que su éxito se suele ver un poco mermado, a no ser que el cambio de solista sea debido a la muerte del anterior, en ese caso el grupo suele sobrevivir (Rip rip, hurra!).

 
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